Tribunal EEUU descarta a ex jefe de FBI como perito en "dieselgate"

San Francisco (EEUU), 12 feb (dpa) - La automotriz alemana Volkswagen logró impedir el nombramiento del antiguo director del FBI Louis Freeh como perito en los juicios del "dieselgate" en Estados Unidos.


En una audiencia celebrada en San Francisco el martes (hora local), el juez encargado del caso, Charles Breyer, dictaminó que Freeh no era opción como perito, dado que su opinión sobre el asunto no era relevante para las actuaciones posteriores.

Volkswagen había criticado duramente a Freeh a causa de una disputa anterior y había presentado una solicitud ante el tribunal para impedir que declarase como experto en el juicio.

El ex jefe de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, la Policía federal norteamericana) trabaja como mediador legal en escándalos empresariales después de haber finalizado su carrera en el servicio público.

En el caso de Volkswagen, Freeh estuvo a punto de obtener un contrato de consultoría a principios de 2016 para ayudar en el esclarecimiento del escándalo por la manipulación de los motores diésel, pero esto no llegó a concretarse.

Según los abogados de la automotriz germana, Freeh también se había postulado como "monitor", que debía supervisar las condiciones impuestas por las autoridades estadounidenses a Volkswagen.

De acuerdo con el fabricante alemán, no se llegó a concretar ningún tipo de cooperación con Freeh debido, entre otras cosas, a las excesivas exigencias salariales del ex jefe del FBI. Ahora Freeh trabaja para abogados de algunos demandantes privados.

Volkswagen sospecha y acusa a Freeh de haber facilitado o incluso vendido información interna de la gestión empresarial a estos abogados y demandantes. Freeh niega haber recibido información confidencial alguna de la empresa alemana.

De todos modos, el tribunal estadounidense solo se ocupa actualmente de un asunto secundario dentro del llamado "dieselgate" relativo a la manipulación del software que mide las emisiones de motores diésel de numerosos vehículos del grupo Volkswagen.

El proceso en curso se refiere a un número ínfimo de demandantes estadounidenses que rechazan la indemnización de Volkswagen acordada en el marco de acuerdos multimillonarios e intentan obtener sumas mayores en los tribunales.