Joachim Löw, el artífice del nuevo fútbol alemán cumple 60 años
Por Klaus Bergmann (dpa)
Múnich, 1 feb (dpa) – El seleccionador alemán de fútbol, Joachim Löw, debe tener algo de vértigo al contar los años que cumplirá el lunes, ya que alcanza la cifra redonda de 60, y se debe sentir diferente a cuando cumplió cincuenta o cuarenta.
"Uno tiene un poco de respeto por la edad y los números", confiesa Löw, nacido el 3 de febrero de 1960 en Schönau, en la Selva Negra, en el suroeste de Alemania.
Sin embargo, Löw aún no piensa en la jubilación. Encontró su vocación como seleccionador nacional en 2006, año desde el que ejerce el cargo, por lo que lleva un cuarto de su vida en él.
Ninguno de los jugadores internacionales alemanes actuales conoce a otro seleccionador que no sea Löw, ni siquiera un veterano como el capitán Manuel Neuer, que está bajo los palos del equipo desde 2009.
"Está en el equipo desde hace ya mucho tiempo. Pero siempre está al día", dijo Neuer sobre su jefe. El portero del Bayern Múnich pasó por todo tipo de momentos con Löw, desde ganar el Mundial de 2014 en Brasil hasta la eliminación en la fase de grupos cuatro años más tarde en el Mundial de Rusia.
Löw ya suma 181 partidos internacionales. Ninguno de sus predecesores llegó a semejante número de partidos como entrenador de la selección alemana.
El cargo ya no es una profesión para Löw, es una vocación, el trabajo soñado. "Como entrenador, lo logró todo", dice Hansi Flick sobre él. El actual entrenador del Bayern Múnich fue su ayudante durante ocho años. Se hicieron amigos y aún mantienen la amistad.
Como jugador, Löw no pudo ir más allá de la selección internacional juvenil, pero se ve a sí mismo como un profesor de fútbol, como un desarrollador.
Actualmente la selección alemana se encuentra en una fase agitada debido a que se enfrenta a una situación muy abierta. La Eurocopa se disputa en verano (boreal) y Alemania tendrá ante sí difíciles partidos en la fase de grupos contra los actuales campeones del mundo y de Europa, Francia y Portugal, respectivamente.
El resultado que obtenga en la cita continental también decidirá su futuro. Tendrá que convencer a muchos aficionados de que a sus 61 años no es un modelo descatalogado.
El capitán Neuer dijo una bonita frase sobre Joachim Löw: "Es una personalidad totalmente estable". Creció en el cargo, pero se mantuvo empático y predecible, y hubo pocos cambios en su equipo técnico más cercano.
Löw no se coloca en el foco de atención, y aunque el fútbol domina su vida, el puesto de seleccionador nacional le proporciona tiempo libre.
La ascensión en 2003 al Kilimanjaro, la montaña más alta de África con 5.895 metros, fue una experiencia extrema e inspiradora para Löw. Según él, le mostró "que hay que avanzar siempre, que puedes volver a dar un paso adelante, aunque creas que ya no lo puedes dar".
Múnich, 1 feb (dpa) – El seleccionador alemán de fútbol, Joachim Löw, debe tener algo de vértigo al contar los años que cumplirá el lunes, ya que alcanza la cifra redonda de 60, y se debe sentir diferente a cuando cumplió cincuenta o cuarenta.
"Uno tiene un poco de respeto por la edad y los números", confiesa Löw, nacido el 3 de febrero de 1960 en Schönau, en la Selva Negra, en el suroeste de Alemania.
Sin embargo, Löw aún no piensa en la jubilación. Encontró su vocación como seleccionador nacional en 2006, año desde el que ejerce el cargo, por lo que lleva un cuarto de su vida en él.
Ninguno de los jugadores internacionales alemanes actuales conoce a otro seleccionador que no sea Löw, ni siquiera un veterano como el capitán Manuel Neuer, que está bajo los palos del equipo desde 2009.
"Está en el equipo desde hace ya mucho tiempo. Pero siempre está al día", dijo Neuer sobre su jefe. El portero del Bayern Múnich pasó por todo tipo de momentos con Löw, desde ganar el Mundial de 2014 en Brasil hasta la eliminación en la fase de grupos cuatro años más tarde en el Mundial de Rusia.
Löw ya suma 181 partidos internacionales. Ninguno de sus predecesores llegó a semejante número de partidos como entrenador de la selección alemana.
El cargo ya no es una profesión para Löw, es una vocación, el trabajo soñado. "Como entrenador, lo logró todo", dice Hansi Flick sobre él. El actual entrenador del Bayern Múnich fue su ayudante durante ocho años. Se hicieron amigos y aún mantienen la amistad.
Como jugador, Löw no pudo ir más allá de la selección internacional juvenil, pero se ve a sí mismo como un profesor de fútbol, como un desarrollador.
Actualmente la selección alemana se encuentra en una fase agitada debido a que se enfrenta a una situación muy abierta. La Eurocopa se disputa en verano (boreal) y Alemania tendrá ante sí difíciles partidos en la fase de grupos contra los actuales campeones del mundo y de Europa, Francia y Portugal, respectivamente.
El resultado que obtenga en la cita continental también decidirá su futuro. Tendrá que convencer a muchos aficionados de que a sus 61 años no es un modelo descatalogado.
El capitán Neuer dijo una bonita frase sobre Joachim Löw: "Es una personalidad totalmente estable". Creció en el cargo, pero se mantuvo empático y predecible, y hubo pocos cambios en su equipo técnico más cercano.
Löw no se coloca en el foco de atención, y aunque el fútbol domina su vida, el puesto de seleccionador nacional le proporciona tiempo libre.
La ascensión en 2003 al Kilimanjaro, la montaña más alta de África con 5.895 metros, fue una experiencia extrema e inspiradora para Löw. Según él, le mostró "que hay que avanzar siempre, que puedes volver a dar un paso adelante, aunque creas que ya no lo puedes dar".
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