Alemania: Comienzan ventas de pirotecnia bajo críticas de ecologistas
Berlín, 28 dic (dpa) - En Alemania comenzaron hoy excepcionalmente las ventas de pirotecnia, si bien los aficionados a los petardos tendrán que esperar hasta la última noche del año para hacerlos explotar.
Por lo común, la venta de artículos pirotécnicos se autoriza a partir del 29 de diciembre, pero este año se adelantó un día ya que en 2019 cae en domingo.
En algunos lugares, por ejemplo, frente a la fábrica de bengalas y cohetes Weco, en Eitorf, en el estado de Renania del Norte-Westfalia, la gente hizo cola desde muy temprano para poder comprar fuegos artificiales.
El tema de los festejos con pirotecnia generó este año algunos debates en Alemania. La organización ecologista Deutsche Umwelthilfe reclamó que en las 98 ciudades con la mayor concentración de micropartículas en el aire no se permitan los fuegos artificiales ni los petardos.
Varias comunas volvieron a decretar zonas con prohibición de petardos, no por motivos ecológicos sino para proteger a los habitantes y los edificios de los cascos antiguos.
En Colonia, por ejemplo, los petardos están prohibidos en las proximidades de la famosa catedral y en partes del centro. La vecina Düsseldorf y la capital alemana, Berlín, también delimitaron zonas libres de pirotecnia.
Sin embargo, una parte de la población está dispuesta a no escatimar gastos para despedir el año. Uno de cada diez alemanes desembolsa una media de 50 euros (56 dólares) o más para comprar pirotecnia, revela una encuesta realizada por el instituto demoscópico YouGov por encargo de dpa.
El tres por ciento de los entrevistados señaló que incluso piensan gastar 100 euros o más.
La federación que agrupa a la industria de la pirotecnia germana espera facturar este año unos 133 millones de euros, es decir una cifra similar a la de 2018.
Por lo común, la venta de artículos pirotécnicos se autoriza a partir del 29 de diciembre, pero este año se adelantó un día ya que en 2019 cae en domingo.
En algunos lugares, por ejemplo, frente a la fábrica de bengalas y cohetes Weco, en Eitorf, en el estado de Renania del Norte-Westfalia, la gente hizo cola desde muy temprano para poder comprar fuegos artificiales.
El tema de los festejos con pirotecnia generó este año algunos debates en Alemania. La organización ecologista Deutsche Umwelthilfe reclamó que en las 98 ciudades con la mayor concentración de micropartículas en el aire no se permitan los fuegos artificiales ni los petardos.
Varias comunas volvieron a decretar zonas con prohibición de petardos, no por motivos ecológicos sino para proteger a los habitantes y los edificios de los cascos antiguos.
En Colonia, por ejemplo, los petardos están prohibidos en las proximidades de la famosa catedral y en partes del centro. La vecina Düsseldorf y la capital alemana, Berlín, también delimitaron zonas libres de pirotecnia.
Sin embargo, una parte de la población está dispuesta a no escatimar gastos para despedir el año. Uno de cada diez alemanes desembolsa una media de 50 euros (56 dólares) o más para comprar pirotecnia, revela una encuesta realizada por el instituto demoscópico YouGov por encargo de dpa.
El tres por ciento de los entrevistados señaló que incluso piensan gastar 100 euros o más.
La federación que agrupa a la industria de la pirotecnia germana espera facturar este año unos 133 millones de euros, es decir una cifra similar a la de 2018.
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