AI reclama a Alemania que siga una política de DDHH más consecuente

Berlín, 9 dic (dpa) - Amnistía Internacional (AI) urgió hoy al Gobierno alemán a utilice su destacado rol en la escena internacional para lograr una política de derechos humanos más consecuente.


"Alemania puede, Alemania debería y Alemania tiene que lograr que, a su anuncio de una política orientada a los derechos humanos, le sigan hechos en Europa y en todo el mundo", señaló hoy el secretario general de Amnistía Internacional Alemania, Markus Beeko, en Berlín.

Beeko añadió que este es también el deseo de la gran mayoría de ciudadanos.

En una encuesta encargada por AI, el 66 por ciento de los entrevistados indicó que desearía que haya una mayor presión del Gobierno alemán sobre aquellos países que violan los derechos humanos.

Beeko indicó que Alemania en 2020 será miembro del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y que formará parte del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, mientras que a mediados de año asumirá la presidencia del Consejo de la Unión Europea (UE).

Añadió que una política de derechos humanos consecuente comienza con el apoyo de aquellos que luchan por los derechos humanos en todo el mundo bajo difíciles condiciones.

El líder de AI considera que Alemania debe aprovechar su liderazgo en el Consejo de la UE para que éste se presente de forma más consecuente ante China.

"La cumbre UE-China anunciada por Alemania para el otoño (boreal) será una prueba clave", señaló Beeko. "Mirar al costado y tolerar graves violaciones de los derechos humanos mina el orden internacional", dijo. Y apuntó: "En tiempos de ataques sistemáticos a los derechos humanos, tampoco puede haber para la UE un 'business as usual'".

Beeko hizo referencia a la persecución de la etnia uigur en el noroeste de China y afirmó que Alemania debería promover el acceso irrestricto de los observadores internacionales a la región de Xinjiang.

El secretario general de AI Alemania también ve déficits en la protección de los derechos humanos en Alemania e hizo referencia al aumento de los discursos y crímenes de odio, los ataques racistas así como "la socavación continua del derecho de protección de los refugiados".