Encuesta: El sector automotor alemán, pesimista de cara al futuro
Berlín, 24 oct (dpa) - Una crisis amenaza con cernirse sobre la industria automotriz de Alemania, un segmento clave para el desarrollo de las exportaciones del país, señala una encuesta de la Cámara Alemana de Industria y Comercio (DIHK).
Las empresas del sector redujeron considerablemente sus expectativas para los próximos doce meses y su optimismo respecto a la actual situación de sus negocios, indica el informe que será presentado el martes pero que ya fue puesto a disposición de la agencia dpa.
La evaluación de la situación de los fabricantes de vehículos cayó por cuarta vez consecutiva, alcanzando el valor más bajo en diez años.
Solo el 22 por ciento de los encuestados afirmó que la situación empresarial es buena, un 55 por ciento señaló que es "satisfactoria" y el 23 por ciento respondió que es deficiente.
El balance entre el optimismo y el pesimismo arrojó un punto a favor de este último, lo que supone un descenso de 17 puntos desde el último sondeo.
De cara al futuro, el 35 por ciento de los entrevistados consideró que sus expectativas son malas o peores que antes.
Según la DIHK, los fabricantes de vehículos y sus proveedores se enfrentan a desafíos coyunturales y en el ámbito de la política de comercio, mientras que la transición tecnológica implica el mayor reto para el sector.
Por un lado, la industria del automotor debe invertir miles de millones en nuevas tecnologías, tales como la movilidad eléctrica, también para cumplir con las normas más estrictas de la Unión Europea.
Por otra parte, muchas empresas registran una merma en sus ganancias debido al debilitamiento de los mercados internacionales de vehículos, detalla el informe.
Las empresas del sector redujeron considerablemente sus expectativas para los próximos doce meses y su optimismo respecto a la actual situación de sus negocios, indica el informe que será presentado el martes pero que ya fue puesto a disposición de la agencia dpa.
La evaluación de la situación de los fabricantes de vehículos cayó por cuarta vez consecutiva, alcanzando el valor más bajo en diez años.
Solo el 22 por ciento de los encuestados afirmó que la situación empresarial es buena, un 55 por ciento señaló que es "satisfactoria" y el 23 por ciento respondió que es deficiente.
El balance entre el optimismo y el pesimismo arrojó un punto a favor de este último, lo que supone un descenso de 17 puntos desde el último sondeo.
De cara al futuro, el 35 por ciento de los entrevistados consideró que sus expectativas son malas o peores que antes.
Según la DIHK, los fabricantes de vehículos y sus proveedores se enfrentan a desafíos coyunturales y en el ámbito de la política de comercio, mientras que la transición tecnológica implica el mayor reto para el sector.
Por un lado, la industria del automotor debe invertir miles de millones en nuevas tecnologías, tales como la movilidad eléctrica, también para cumplir con las normas más estrictas de la Unión Europea.
Por otra parte, muchas empresas registran una merma en sus ganancias debido al debilitamiento de los mercados internacionales de vehículos, detalla el informe.
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