Fórmula 1: Vettel, desesperado ante el nuevo 'cachorro' de Ferrari

Por Jens Marx (dpa)
Monza (Italia), 9 sep (dpa) – El alemán Sebastian Vettel, cuatro veces campéon del mundo de Fórmula 1, vive sus peores resultados desde que empezó a correr en el equipo Ferrari, y se vislumbran los peores augurios tras las victorias de su compañero de equipo, la última en el reciente Gran Premio de Italia disputado en Monza.


Sebastian Vettel se mordisqueaba el labio inferior, se levantó el cuello rojo de su chubasquero en la autocaravana de Ferrari, como si quisiera esconderse. Los observadores buscaron en vano una sonrisa.

"Todavía me encanta lo que hago, pero si no lo haces bien, tampoco puedes ser feliz", admitió Vettel. Su quinto año en la 'Scuderia' se supone que sería como el de Michael Schumacher, cuando obtuvo su primer título para Ferrari. Vettel no podría estar más lejos de este objetivo después del desastre de Monza.

El piloto alemán de 32 años bajó a la quinta posición de la clasificación del Mundial tras terminar décimo tercero en el emocionante Gran Premio de Italia, a más de una vuelta de su compañero de equipo Charles Leclerc. "Leclerc jubila a Vettel con una magnífica victoria en Monza", tituló explícitamente el periódico deportivo español "Marca".

¿Está Vettel listo para retirarse? Probablemente está pasando por los momentos más difíciles de su carrera en la Fórmula 1, que comenzó en 2007. "El cisne se convirtió en un patito feo. La parábola de Sebastian Vettel es un caso de psicología del deporte", comentó fríamente el diario italiano "La Stampa", después de que Vettel perdiera una vez más su buena posición de salida. "Cometió algunos errores, pero así es Monza", explicó Mattia Binotto, jefe del equipo Ferrari.

Ahora Monza se le aparece a Vettel en todas partes. Desde el 26 de agosto de 2018 espera con impaciencia la victoria número 53 de su carrera. La cadena británica BBC calculó que Vettel cometió nueve errores importantes en las últimas 27 carreras, lo cual no es forma de convertirse en campeón del mundo, pero sí de perder el favor de los 'ferraristi'.

En Bélgica, hace poco más de una semana, Vettel asumió el papel de segundo de su compañero de equipo, más de diez años más joven. Y el domingo, en Italia, en la segunda victoria consecutiva de Leclerc, el nuevo orden de prioridades de Ferrari se consolidó según muchos observadores, aunque los pilotos no lo admitieran.

Pero las imágenes lo dicen todo. Leclerc defendió la cabeza de carrera como un campeón, con la presión de correr en casa de Ferrari y viendo en todo momento al líder del Mundial, Lewis Hamilton, en su retrovisor.

La prensa italiana se deshizo en elogios. "Incluso Ayrton Senna estaría orgulloso de este tierno e implacable muchacho después de una carrera así", dijo el "Corriere della Sera", mientras "La "Gazzetta dello Sport" celebró al "príncipe victorioso: Todos están locos por él".

Leclerc es demasiado listo e inteligente como para demostrar su nuevo papel delante de Vettel. El monegasco, asesorado por el hijo del antiguo jefe del equipo Ferrari Jean Todt, subrayó la necesidad de trabajar en equipo. Después de un año con Sauber (con motor Ferrari, sustituido ahora por Alfa Romeo), Leclerc se convirtió en piloto de la 'Scuderia' esta temporada.

El pasado año, el finlandés Kimi Räikkönen tuvo que dejar Ferrari y su título de 2007 hace de él el último campeón del mundo de la marca de Maranello. Vettel perdió así a su veterano compañero de equipo, de casi 40 años, y vio cómo le emparejaban con la nueva esperanza de Ferrari, Leclerc.

Mientras Vettel, con su chubasquero rojo, solo podía envidiar el trofeo que estaba junto al ganador de Monza, de 21 años, éste se mostraba satisfecho tras su primera victoria 'en casa'. "Por supuesto que es pronto pero estoy muy agradecido a Ferrari por ello", dijo Leclerc tras su victoria ante los 'tifosi', y añadió: "Pero yo estaba más preparado de lo que algunos pensaban".