Una nueva era para la Berlinale: Asume la nueva dirección bicéfala
Por Caroline Bock (dpa)
Berlín, 31 may (dpa) - Los primeros cambios ya fueron anunciados y las oficinas en el Potsdamer Platz ya fueron ocupadas: la nueva dirección de la Berlinale comenzará oficialmente su trabajo en la primera semana de junio.
El italiano Carlo Chatrian (47) y la holandesa Mariette Rissenbeek (62) serán la dupla a cargo del prestigioso festival de cine alemán.
Chatrian, quien previamente fue responsable del festival de cine de Locarno, se convertirá en director artístico. Y Rissenbeek, experta en comercialización de películas, se desempeñará como directora ejecutiva.
Para el mayor festival de cine de Alemania, uno de los más importantes del mundo junto con los certámenes de Cannes y Venecia, se abre una nueva era.
La 69 edición de la Berlinale en febrero pasado fue la última dirigida por el alemán Dieter Kosslick, quien abandonó el cargo tras 18 años, llevándose grandes elogios y un gigantesco oso de peluche.
Chatrian y Rissenbeek heredan de Kosslick un festival pujante, con 400 películas anuales y más de 300.000 tickets vendidos. Sin embargo, no será fácil encontrar un nuevo camino. Algunos críticos consideran que el Festival Internacional de Cine de Berlín es demasiado grande.
A los fans les gusta la abrumadora variedad de cintas. Si vienen estrellas, esto es fantástico. Pero si sus películas son malas, esto tampoco está bien. Las películas deben tener ambición artística y al mismo tiempo complacer a los espectadores.
Pero lo que es seguro es que la Berlinale continuará siendo un festival de público. Chatrian declaró en entrevista con dpa en abril pasado que no tenía la sensación de que el festival debiera achicarse. "Porque el público asiste a las películas", señaló. Rissenbeek, en tanto, prometió tanto cintas para un público más amplio como para grupos especiales.
Además de algunas modificaciones de personal, también quedaron claros los primeros recortes en el programa. La sección de Cine Culinario introducida por Kosslick, al igual que la serie NATIVe, desaparecerán.
En tanto, se incoporará como novedad otra sección competitiva, denominada Encounters (encuentros), donde se exhibirán hasta 15 películas, y que buscará respaldar nuevas e inusuales voces de la cinematografía. Un jurado compuesto por tres personas decidirá los galardones para mejor película, mejor dirección y un premio especial.
Y además está la candente cuestión de Netflix. La nueva dirección bicéfala del certamen no favorece excluir de los festivales por principio a los servicios de streaming, competidores de los cines.
"Son las personas jóvenes, las que miran Netflix, a las que se quiere llevar nuevamente a las salas de cine. Pero excluir a los servicios de streaming de la Berlinale sería probablemente el camino equivocado", comentó Rissenbeek.
La septuagésima edición de la Berlinale se celebrará en la capital germana entre el 20 de febrero y el 1 de marzo de 2020.
Berlín, 31 may (dpa) - Los primeros cambios ya fueron anunciados y las oficinas en el Potsdamer Platz ya fueron ocupadas: la nueva dirección de la Berlinale comenzará oficialmente su trabajo en la primera semana de junio.
El italiano Carlo Chatrian (47) y la holandesa Mariette Rissenbeek (62) serán la dupla a cargo del prestigioso festival de cine alemán.
Chatrian, quien previamente fue responsable del festival de cine de Locarno, se convertirá en director artístico. Y Rissenbeek, experta en comercialización de películas, se desempeñará como directora ejecutiva.
Para el mayor festival de cine de Alemania, uno de los más importantes del mundo junto con los certámenes de Cannes y Venecia, se abre una nueva era.
La 69 edición de la Berlinale en febrero pasado fue la última dirigida por el alemán Dieter Kosslick, quien abandonó el cargo tras 18 años, llevándose grandes elogios y un gigantesco oso de peluche.
Chatrian y Rissenbeek heredan de Kosslick un festival pujante, con 400 películas anuales y más de 300.000 tickets vendidos. Sin embargo, no será fácil encontrar un nuevo camino. Algunos críticos consideran que el Festival Internacional de Cine de Berlín es demasiado grande.
A los fans les gusta la abrumadora variedad de cintas. Si vienen estrellas, esto es fantástico. Pero si sus películas son malas, esto tampoco está bien. Las películas deben tener ambición artística y al mismo tiempo complacer a los espectadores.
Pero lo que es seguro es que la Berlinale continuará siendo un festival de público. Chatrian declaró en entrevista con dpa en abril pasado que no tenía la sensación de que el festival debiera achicarse. "Porque el público asiste a las películas", señaló. Rissenbeek, en tanto, prometió tanto cintas para un público más amplio como para grupos especiales.
Además de algunas modificaciones de personal, también quedaron claros los primeros recortes en el programa. La sección de Cine Culinario introducida por Kosslick, al igual que la serie NATIVe, desaparecerán.
En tanto, se incoporará como novedad otra sección competitiva, denominada Encounters (encuentros), donde se exhibirán hasta 15 películas, y que buscará respaldar nuevas e inusuales voces de la cinematografía. Un jurado compuesto por tres personas decidirá los galardones para mejor película, mejor dirección y un premio especial.
Y además está la candente cuestión de Netflix. La nueva dirección bicéfala del certamen no favorece excluir de los festivales por principio a los servicios de streaming, competidores de los cines.
"Son las personas jóvenes, las que miran Netflix, a las que se quiere llevar nuevamente a las salas de cine. Pero excluir a los servicios de streaming de la Berlinale sería probablemente el camino equivocado", comentó Rissenbeek.
La septuagésima edición de la Berlinale se celebrará en la capital germana entre el 20 de febrero y el 1 de marzo de 2020.
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