La primera ministra de Nueva Zelanda comprometida

VOA - INGLÉS
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, está comprometida con su pareja de mucho tiempo, Clarke Gayford, luego de una propuesta durante las vacaciones de Semana Santa, dijo el viernes su portavoz.


Gayford, el presentador de un programa de pesca en televisión de 41 años, se ocupa de su hija Neve Te Aroha, de 10 meses, mientras que Ardern, de 38 años, dirige el país.

Su embarazo anunciado a principios de 2018 fue visto por muchos como un símbolo del progreso de las mujeres en roles de liderazgo. Solo es el segundo líder electo en dar a luz mientras está en el cargo, después de Benazir Bhutto de Pakistán en 1990.

La BBC le preguntó a Ardern mientras visitaba Londres en enero si consideraría pedirle a Gayford que se case con ella o esperar a que él proponga.

"Absolutamente, soy feminista, pero quiero enfrentarlo con el dolor y la tortura de tener que agonizar sobre esa pregunta. Eso lo está dejando libre, absolutamente no ", dijo en tono de broma.

La noticia de su compromiso se rompió cuando los periodistas notaron que Ardern llevaba un anillo en un evento público el viernes.

Su portavoz Andrew Campbell confirmó que llevaba el anillo desde Pascua. No dio detalles de la propuesta.

La pareja se reunió hace aproximadamente seis años cuando Gayford fue a quejarse a un miembro del parlamento sobre los cambios propuestos por el gobierno del Partido Nacional en la legislación de seguridad.

Se topó con Ardern, una estrella en ascenso en el Partido Laborista, tomaron café y vivieron juntos poco después.

El programa televisivo de Gayford, Fish of the Day, lo lleva por el Pacífico, pescando y encontrando recetas para su captura. La serie se ha vendido a 20 países y ganó un premio de oro en el Festival Internacional de Cine de Houston en 2016.

Mientras Ardern amamantaba a su pequeña hija, la familia viajó a Nueva York para asistir a la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre pasado.

La familia divide su tiempo entre la capital, Wellington y Auckland, donde poseen una casa en un suburbio del centro de la ciudad.

La calmada y compasiva respuesta de Ardern al asesinato de 51 musulmanes en marzo pulió las credenciales de un líder que ha sido criticado a nivel nacional por su manejo de la economía y sus fallas en la política del gobierno.