Justicia italiana no constata delitos de barco de ONG alemana
Roma, 2 feb (dpa) - La organización alemana de ayuda a migrantes Sea-Watch no violó leyes al rescatar del Mar Mediterráneo a 47 refugiados, sostuvo hoy la fiscalía de Catania, en la isla italiana de Sicilia.
La fiscalía manifestó al mismo tiempo dudas sobre si el barco "Sea-Watch 3" estaba en condiciones de efectuar rescates en el Mediterráneo, señala un comunicado emitido hoy en Catania.
Tras una odisea de casi dos semanas con los migrantes a bordo, el "Sea-Watch 3" recibió el jueves el permiso de amarrar en el puerto de Catania. La decisión se produjo después de que varios países europeos se comprometieron a recibir a los refugiados.
El viernes, la Guardia Costera italiana retuvo el barco en el puerto alegando irregularidades en cuanto a la seguridad.
La fiscalía de Catania informó asimismo que abrió una investigación contra desconocidos por favorecer la inmigración ilegal. La Justicia italiana apunta a los traficantes libios que organizan la partida de los refugiados, así como a aquellos que dirigían el bote antes del rescate.
El ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, acusó a la ONG Sea-Watch de haber enfilado hacia Italia "en el medio de un temporal" en lugar de dirigirse hacia la vecina Túnez.
Los fiscales de Catania aclararon que el tiempo era bueno cuando el "Sea-Watch 3" puso proa rumbo a Lampedusa y consideraron que estaba "justificado" que el capitán hubiese resuelto seguir viaje hacia la costa este de Sicilia.
Asimismo recordaron que en el pasado las autoridades tunecinas negaron a la ONG amarrar en sus puertos para aprovisionarse.
La fiscalía manifestó al mismo tiempo dudas sobre si el barco "Sea-Watch 3" estaba en condiciones de efectuar rescates en el Mediterráneo, señala un comunicado emitido hoy en Catania.
Tras una odisea de casi dos semanas con los migrantes a bordo, el "Sea-Watch 3" recibió el jueves el permiso de amarrar en el puerto de Catania. La decisión se produjo después de que varios países europeos se comprometieron a recibir a los refugiados.
El viernes, la Guardia Costera italiana retuvo el barco en el puerto alegando irregularidades en cuanto a la seguridad.
La fiscalía de Catania informó asimismo que abrió una investigación contra desconocidos por favorecer la inmigración ilegal. La Justicia italiana apunta a los traficantes libios que organizan la partida de los refugiados, así como a aquellos que dirigían el bote antes del rescate.
El ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, acusó a la ONG Sea-Watch de haber enfilado hacia Italia "en el medio de un temporal" en lugar de dirigirse hacia la vecina Túnez.
Los fiscales de Catania aclararon que el tiempo era bueno cuando el "Sea-Watch 3" puso proa rumbo a Lampedusa y consideraron que estaba "justificado" que el capitán hubiese resuelto seguir viaje hacia la costa este de Sicilia.
Asimismo recordaron que en el pasado las autoridades tunecinas negaron a la ONG amarrar en sus puertos para aprovisionarse.
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