Alemania: ¿Qué significa el final del carbón como fuente de energía?

Por Teresa Dapp, Andreas Hoenig und Georg Ismar (dpa)
Berlín, 27 ene (dpa) - La llamada "Comisión del Carbón" del Gobierno alemán recomendó que Alemania deje de producir energía en base al carbón a más tardar a finales de 2038. El acuerdo sobre el calendario de la salida del carbón como una de las principales fuentes energéticas demuestra que aun en tiempos de gran polarización es posible lograr compromisos.


¿Cuándo será la salida del carbón?

Tras largas negociaciones con ecologistas, representantes de los sindicatos, empresas y científicos, Ronald Pofalla, ex jefe de Gabinete de la canciller alemana Angela Merkel y uno de los presidentes de la Comisión, dijo: "Ha sido logrado". La ronda final arrojó un resultado de 27 votos a favor y uno en contra. "La Comisión recomienda a más tardar finales de 2038 como fecha de cierre", señala el informe de 336 páginas.

¿Es posible dejar de usar carbón antes de esa fecha?

Sí. Esa es una de las cláusulas por las que lucharon las asociaciones ecologistas. Si el abastecimiento de electricidad y la situación económica lo permiten, la fecha podría ser adelantada a 2035 en conformidad con los operadores de energía eléctrica. Este paso será examinado en 2032. El número de centrales eléctricas que deberán ser desconectadas de la red también será revisado en 2023, 2026 y 2029. El partido ecologista Los Verdes y las asociaciones de protección ambiental advierten que, debido al calentamiento global, aumenta la presión para dejar de usar carbón antes de la fecha límite.

¿Existe el peligro de una falta de electricidad?

El ministro alemán de Economía, Peter Altmaier, asegura que no. Según datos de la federación alemana de compañías relacionadas con el suministro de energía eléctrica y agua (BDEW), las energías renovables ya tienen en Alemania un porcentaje del 35 por ciento en la producción de energía. La hulla y el lignito también suman 35 por ciento. Un 13 por ciento de la electricidad en Alemania proviene de plantas de gas, las centrales nucleares aportan apenas un doce por ciento. El resto es generado en centrales de acumulación por bombeo o de petróleo. Es decir que un tercio de la producción de electricidad tiene que ser sustituido por otras fuentes. Por otro lado, las plantas que operan con hulla y lignito pueden generar un volumen fiable de electricidad a toda hora, a diferencia de las instalaciones de energía solar o eólica. Se planea compensar esta situación mediante la ampliación de la red eólica offshore y el almacenamiento de energía solar y eólica sobrante, así como la construcción de nuevas centrales de gas.

¿Por qué es tan importante dejar de usar el carbón como fuente de energía en Alemania?

Porque el país está bastante lejos de alcanzar las metas que se impuso respecto al clima, por ejemplo, en reducir las emisiones causantes del efecto invernadero en un 40 por ciento hasta 2020 respecto a 1990. Estos valores deberían ser un 50 por ciento inferiores hasta 2030 y al menos 80 por ciento más bajos hasta 2050. Dado que el sector del transporte hasta ahora apenas logró reducir las emisiones, el tema de imponer un límite de velocidad de 130 km/h en las autopistas alemanas también está siendo motivo de acaloradas discusiones en el país.