Cumbre de UE cierra con optimismo sobre futuro acuerdo para "Brexit"
Bruselas, 18 oct (dpa) - La Unión Europea (UE) y Reino Unido expresaron ayer optimismo sobre un futuro acuerdo para el "Brexit", pese a que la cumbre que mantuvo el bloque en Bruselas cerró sin grandes avances.
En la capital belga, la primera ministra británica, Theresa May, dedicó 15 minutos a subrayar su visión sobre la situación actual a los 27 líderes de la UE, antes de que se retiraran a evaluar los próximos pasos y debatir los preparativos para un escenario sin acuerdos.
"Un acuerdo es factible y es el momento de terminarlo", dijo ayer temprano, aunque sin pronunciarse sobre la exigencia de Bruselas de que presente nuevas propuestas constructivas.
La primera ministra dijo que estaba "lista para considerar" una extensión del período de transición de 21 meses tras la salida del Reino Unido de la UE, el "Brexit", según una autoridad del bloque que habló en condición de anonimato.
Se prevé que Reino Unido abandone la UE el 29 de marzo de 2019, pero las negociaciones para regular el "Brexit" se estancaron el pasado fin de semana, sobre todo debido a los desacuerdos en torno a los controles en la futura frontera entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, que se convertirá en frontera exterior de la UE.
May reconoció que sigue habiendo cuestiones abiertas debido a la exigencia de la UE de un plan de contingencia para evitar una "frontera dura", conocido como "backstop, como la que existía hace 20 años en la isla de Irlanda para separar una república que seguirá formando parte de la UE y un territorio que quedará fuera.
Si se trabaja de forma intensa "en los próximos días y semanas", un acuerdo es posible, aseguró. Algo que beneficiaría tanto a Reino Unido como a la UE.
El riesgo, si llega la fecha y no hay acuerdo que regule el "Brexit", es un escenario de caos en la economía y otros sectores que perjudique a las dos partes.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, afirmó tras la exposición de May que la primera ministra no ha ofrecido nada "sustancialmente nuevo" a los líderes de la UE, aunque destacó que sonó "más relajada" que cuando se encontró por última vez con los 27 jefes de Estado del bloque en la ciudad austríaca de Salzburgo el mes pasado. Asimismo, dijo percibir "voluntad política para avanzar".
"No percibí nada sustancialmente nuevo en términos de contenido en lo que escuché de la señora May", dijo Tajani a periodistas. Sin embargo, subrayó que percibió que la primera ministra británica habló con "el tono de alguien que quiere alcanzar un acuerdo".
"Quiero ser optimista porque el mensaje político de la señora May es un mensaje político positivo: queremos alcanzar un acuerdo. En el contenido, nada nuevo, pero el lenguaje corporal fue más positivo que en el pasado", expresó.
La canciller alemana, Angela Merkel, también consideró que hay una oportunidad para que se llegue a un acuerdo. "Mi intención es hacer siempre todo lo posible para llegar a un acuerdo", señaló. "Sería lo mejor para todas las partes". De todas maneras, advirtió: "Queda aún trabajo por delante".
Previamente, Merkel había declarado ante el Parlamento alemán que si bien aún es posible alcanzar un acuerdo con Reino Unido, su Gobierno ya se está preparando para la posibilidad de que no sea así.
"Deseo que Reino Unido después de que salga de Europa siga siendo también un socio estrecho y de confianza de Europa", afirmó en su declaración de Gobierno en el Bundestag. Sin embargo, "debemos estar preparados para todos los escenarios, incluido la posibilidad de que Reino Unido salga de la UE sin un acuerdo. Ya hemos comenzado a ello en el Gobierno", indicó.
"La salida de Reino Unido tendrá lugar en menos de seis meses", recordó. "Por desgracia no hemos conseguido avanzar en una cuestión central como es la futura frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte", señaló sobre uno de los principales puntos de fricción.
Para Merkel, "no se trata sólo de la integridad del mercado interior de la UE, sino también del Acuerdo de Viernes Santo (1998) que puso fin a la violencia que hubo durante años (en Irlanda del Norte)".
Irlanda, que pertenece a la UE, no quiere bajo ningún concepto volver a levantar una frontera que se desmanteló hace 20 años en esa zona por temor a nuevos episodios de violencia en una región que en el pasado vivió un sangriento conflicto.
En la cumbre de ayer estaba previsto que se debatiera la convocatoria a una reunión extraordinaria en noviembre, pero por el momento no hubo una decisión al respecto. Según indicaron los jefes de Estado y de Gobierno ayer en Bruselas, se convocará al encuentro cuando el jefe negociador de la UE, Michel Barnier, diga que hubo "avances decisivos".
Reino Unido quiere abandonar el bloque el 29 de marzo de 2019, después de que la población votara a favor de la salida en un referéndum organizado en 2016.
En la capital belga, la primera ministra británica, Theresa May, dedicó 15 minutos a subrayar su visión sobre la situación actual a los 27 líderes de la UE, antes de que se retiraran a evaluar los próximos pasos y debatir los preparativos para un escenario sin acuerdos.
"Un acuerdo es factible y es el momento de terminarlo", dijo ayer temprano, aunque sin pronunciarse sobre la exigencia de Bruselas de que presente nuevas propuestas constructivas.
La primera ministra dijo que estaba "lista para considerar" una extensión del período de transición de 21 meses tras la salida del Reino Unido de la UE, el "Brexit", según una autoridad del bloque que habló en condición de anonimato.
Se prevé que Reino Unido abandone la UE el 29 de marzo de 2019, pero las negociaciones para regular el "Brexit" se estancaron el pasado fin de semana, sobre todo debido a los desacuerdos en torno a los controles en la futura frontera entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, que se convertirá en frontera exterior de la UE.
May reconoció que sigue habiendo cuestiones abiertas debido a la exigencia de la UE de un plan de contingencia para evitar una "frontera dura", conocido como "backstop, como la que existía hace 20 años en la isla de Irlanda para separar una república que seguirá formando parte de la UE y un territorio que quedará fuera.
Si se trabaja de forma intensa "en los próximos días y semanas", un acuerdo es posible, aseguró. Algo que beneficiaría tanto a Reino Unido como a la UE.
El riesgo, si llega la fecha y no hay acuerdo que regule el "Brexit", es un escenario de caos en la economía y otros sectores que perjudique a las dos partes.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, afirmó tras la exposición de May que la primera ministra no ha ofrecido nada "sustancialmente nuevo" a los líderes de la UE, aunque destacó que sonó "más relajada" que cuando se encontró por última vez con los 27 jefes de Estado del bloque en la ciudad austríaca de Salzburgo el mes pasado. Asimismo, dijo percibir "voluntad política para avanzar".
"No percibí nada sustancialmente nuevo en términos de contenido en lo que escuché de la señora May", dijo Tajani a periodistas. Sin embargo, subrayó que percibió que la primera ministra británica habló con "el tono de alguien que quiere alcanzar un acuerdo".
"Quiero ser optimista porque el mensaje político de la señora May es un mensaje político positivo: queremos alcanzar un acuerdo. En el contenido, nada nuevo, pero el lenguaje corporal fue más positivo que en el pasado", expresó.
La canciller alemana, Angela Merkel, también consideró que hay una oportunidad para que se llegue a un acuerdo. "Mi intención es hacer siempre todo lo posible para llegar a un acuerdo", señaló. "Sería lo mejor para todas las partes". De todas maneras, advirtió: "Queda aún trabajo por delante".
Previamente, Merkel había declarado ante el Parlamento alemán que si bien aún es posible alcanzar un acuerdo con Reino Unido, su Gobierno ya se está preparando para la posibilidad de que no sea así.
"Deseo que Reino Unido después de que salga de Europa siga siendo también un socio estrecho y de confianza de Europa", afirmó en su declaración de Gobierno en el Bundestag. Sin embargo, "debemos estar preparados para todos los escenarios, incluido la posibilidad de que Reino Unido salga de la UE sin un acuerdo. Ya hemos comenzado a ello en el Gobierno", indicó.
"La salida de Reino Unido tendrá lugar en menos de seis meses", recordó. "Por desgracia no hemos conseguido avanzar en una cuestión central como es la futura frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte", señaló sobre uno de los principales puntos de fricción.
Para Merkel, "no se trata sólo de la integridad del mercado interior de la UE, sino también del Acuerdo de Viernes Santo (1998) que puso fin a la violencia que hubo durante años (en Irlanda del Norte)".
Irlanda, que pertenece a la UE, no quiere bajo ningún concepto volver a levantar una frontera que se desmanteló hace 20 años en esa zona por temor a nuevos episodios de violencia en una región que en el pasado vivió un sangriento conflicto.
En la cumbre de ayer estaba previsto que se debatiera la convocatoria a una reunión extraordinaria en noviembre, pero por el momento no hubo una decisión al respecto. Según indicaron los jefes de Estado y de Gobierno ayer en Bruselas, se convocará al encuentro cuando el jefe negociador de la UE, Michel Barnier, diga que hubo "avances decisivos".
Reino Unido quiere abandonar el bloque el 29 de marzo de 2019, después de que la población votara a favor de la salida en un referéndum organizado en 2016.
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