Nieto quiere enterrar a jefe de Estado de RDA Honecker en Berlín

 


Berlín, 8 sep (dpa) - El nieto del ex jefe de Estado de la extinta Alemania socialista Erich Honecker, Roberto Yañez Betancourt, quiere enterrar a sus abuelos Erich y Margot en Alemania, señalan hoy varios diarios alemanes.


Los diarios "Berliner Zeitung", "Bild" y "B.Z." citan del nuevo libro escrito por Yañez y el coautor Thomas Grimm, "Fui el último ciudadano de la RDA", en el que revela que sus abuelos no están enterrados en Chile.

Honecker siempre tuvo el deseo de ser sepultado "en Alemania, en el mejor de los casos en su localidad natal de Neukirchen, en el Sarre", dijo Grimm al "Berliner Zeitung".

Tras la caída del Muro de Berlín, Margot Honecker se instaló a principios de los 1990 en Santiago de Chile en casa de su hija Sonja, que estaba casada con el exiliado chileno Leo Yañez.

La ex ministra de Educación de la RDA fue investigada pero nunca juzgada por las adopciones forzosas de niños cuyos padres habían huido al oeste y por las condiciones inhumanas de hogares para jóvenes considerados "problemáticos" para el régimen.

Su marido sí fue juzgado en 1992 por haber dado órdenes de disparar contra quienes intentaron cruzar la frontera hacia Alemania Occidental. Sin embargo, el proceso se suspendió en 1993 por el cáncer avanzado que sufría el acusado y Honecker pudo unirse a su familia en Chile, donde murió en 1994, a los 81 años.

Margot Honecker confió a un amigo la urna con los restos de su marido hasta su propia muerte en 2016. Esta persona tiene en su poder las dos urnas.

La hija de los Honecker, Sonja, quiere arrojar las cenizas a las aguas del Pacífico, pero el nieto Roberto considera a sus abuelos figuras de importancia histórica y por eso aspira a darles sepultura en Alemania. "Lo mejor sería que estuvieran en el Cementerio de los Socialistas en Friedrichsfelde, junto con sus antiguos camaradas", explicó Grimm sobre los planes del nieto.

Roberto Yañez, de 44 años, es pintor, poeta y músico. Tras la caída del Muro dejó su Berlín natal para radicarse en Chile. En el libro detalla que su abuela lo ayudó a superar sus adicciones al alcohol y las drogas enviándolo a una terapia a Cuba, consigna el diario "B.Z.".