Merkel ve "profundas diferencias" con Turquía y pide liberar presos

Berlín, 28 sep (dpa) - La canciller alemana, Angela Merkel, reconoció hoy la existencia de "profundas diferencias" con Turquía en temas como la libertad de prensa y los derechos humanos y reclamó una "rápida solución" para poner en libertad a los alemanes detenidos en Turquía.

"Insté a que estos casos se resuelvan lo antes posible", dijo tras un encuentro con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en la Cancillería de Berlín. Está claro que todavía existen "profundas diferencias" con Turquía en relación con las cuestiones de la libertad de prensa y el Estado de derecho, indicó en la rueda de prensa conjunta.

Asimismo, informó que también insistirá en la liberación de los alemanes aún encarcelados en Turquía en próximos encuentros como, por ejemplo, durante el desayuno que mantendrá con Erdogan este sábado por la mañana, en el último día de la visita de Estado del presidente turco a Alemania.

Según el Ministerio de Exteriores alemán, cinco ciudadanos alemanes están actualmente detenidos en Turquía por razones políticas. Desde el punto de vista alemán, las vagas acusaciones terroristas no justifican ni meses de detención preventiva ni años de prisión, que se impusieron en varios casos. Prisioneros prominentes como Peter Steudtner, Deniz Yücel y Mesale Tolu fueron liberados en los últimos meses.

Sin embargo, Merkel también hizo hincapié en los intereses comunes con Turquía. "Tenemos muchas cosas que nos unen", declaró y recordó la asociación en la OTAN, las cuestiones de la migración y la lucha contra el terrorismo y señaló que ese país acoge a más de tres millones de refugiados. La mandataria indicó que espera poder contar con una Turquía estable y fuerte. "Alemania tiene interés en una Turquía económicamente estable", afirmó.

Dentro de las conversaciones con Ankara, Merkel informó hoy de que se reunirá en octubre con los presidentes de Francia -Emmanuel Macron-, Rusia -Vladimir Putin- y Turquía para celebrar una conferencia sobre la crítica situación en Siria. La líder conservadora indicó que la reunión deberá centrarse en la crítica situación en torno al último bastión rebelde, Idlib.

Por su parte, Erdogan exigió que Alemania extradite a los partidarios del movimiento Gülen. Cientos de partidarios de la "organización terrorista" del predicador Fethullah Gülen viven en Alemania, comentó, y subrayó que estos son culpables del intento de golpe de Estado contra él en 2016. El poder judicial turco es, por cierto, independiente, dijo con vistas a las críticas alemanas contra los procedimientos contra ciudadanos alemanes encarcelados en Turquía.

Turquía aspira a que Alemania considere a los partidarios de Gülen como una organización terrorista y pide la extradición de decenas de turcos residentes en Alemania y que Ankara considera vinculados a la trama golpista.

Según los medios de comunicación, el Gobierno turco exigió la extradición de personas sospechosas de terrorismo en Turquía poco antes de la visita. El conocido periodista Can Dündar, que vive exiliado en Berlín, también está en la lista. A pesar de estar acreditado para la rueda de prensa, el antiguo editor jefe del periódico crítico "Cumhuriyet" canceló en el último momento su asistencia por supuestas amenazas de Turquía de suspender la rueda de prensa.

"Ese es nuestro derecho natural", insistió Erdogan al ser preguntado al respecto. Dündar es un "agente", declaró y recordó que hizo públicos secretos de Estado por lo que fue condenado a cinco años y diez meses de prisión por ello.

Durante la rueda de prensa hubo un incidente. Un hombre tuvo que ser sacado de la misma por las fuerzas de seguridad, mientras los dos mandatarios seguían lo ocurrido en silencio.

La visita de Erdogan a Alemania, un país donde residen cerca de tres millones de turcos, pretende limar asperezas tras una serie de desencuentros diplomáticos que a lo largo de los últimos meses han enfríado las relaciones entre ambos Gobiernos.

Berlín se blincó con ocasión de la llegada del presidente turco. Las autoridades desplegaron 5.000 agentes de policía en las calles de Berlín y muchas zonas de la capital quedaron bloqueadas.

La visita es muy polémica en Alemania debido a las violaciones de los derechos humanos en Turquía y están previstas varias manifestaciones para hoy en la capital alemana convocadas por Amnistía Internacional y Reporteros Sin Fronteras, entre otras organizaciones.