Alemania admite errores y mira al futuro con aires de renovación

 


Por Klaus Bergmann (dpa)

Múnich, 30 ago (dpa) - El seleccionador alemán, Joachim Löw, admitió ayer haber cometido errores en el Mundial de Rusia y en la gestión del caso Mesut Özil, pero insistió en que el equipo tiene la clase para recuperarse y nominó a tres nuevos jugadores para los dos próximos partidos de la "Mannschaft".


El defensa del París Saint-Germain Thilo Kehrer y los centrocampistas Kai Havertz, del Bayer Leverkusen, y Nico Schulz, del Hoffenheim, fueron convocados para el partido inaugural de la Liga de las Naciones, el 9 de septiembre ante la campeona del mundo, Francia, y para el amistoso ante Perú que se disputará tres días después.

Además, vuelven a formar parte de la convocatoria el delantero del Freiburg Nils Petersen, el extremo del Manchester City Leroy Sané y el defensa del Bayer Leverkusen Jonathan Tah, que quedaron fuera del Mundial de Rusia.

En cambio, Sami Khedira y Sebastian Rudy no fueron elegidos, mientras que Mesut Özil y Mario Gomez se han retirado. Así, en la primera convocatoria tras el desastre de Rusia 2018 aparecen 17 jugadores que participaron en el Mundial.

Los partidos en Múnich y Sinsheim, en el sudoeste de Alemania, son los primeros de la Alemania después de la debacle de hace dos meses en Rusia. La "Mannschaft" fue eliminada en la fase de grupos por primera vez en su historia: perdió 1-0 ante México en su debut, ganó a Suecia con un 2-1 agónico en la segunda jornada y cayó 2-0 ante Corea del Sur en el último duelo.

Löw calificó ayer la eliminación del Mundial como un "duro golpe". No hay nada que endulzar, dijo Löw y añadió: "Nos quedamos muy por debajo de nuestras posibilidades y con razón pagamos por ello".

Los primeros dos o tres días después de tener que hacer las maletas para regresar a Alemania estuvieron marcados por la "frustración, la depresión y una gran parte de ira", indicó.

"Mi mayor error fue pensar que con nuestro estilo dominante pasaríamos la fase de grupos", reconoció en Múnich en su primera rueda de prensa tras el Mundial. "Cuando llevamos a cabo este estilo juego, todas las condiciones marco deben ser las correctas para que podamos hacer frente a este alto riesgo. Estas condiciones no fueron las adecuadas para nosotros en esos partidos".

"Fue casi arrogante. Quería llevar este juego a la cima y perfeccionarlo aún más. Debería haber preparado al equipo como lo hice en 2014, cuando había un equilibrio entre lo ofensivo y lo defensivo", afirmó el técnico.

A pesar de la dolorosa eliminación, Löw se mantuvo en el cargo y ahora tiene ante sí el reto de renovar la ilusión en su equipo. Sin embargo, insistió: "Nunca renunciaremos a nuestra visión... Necesitamos encontrar nuevas formas de ser más versátiles con nuestro juego".

"Tenemos ideas claras. Debemos mostrar una nueva cara y hacer una declaración clara. Estoy absolutamente convencido de nuestra clase y calidad", dijo.

Además, se anunció que Thomas Schneider dejará de ser el ayudante de Löw y se encargará del departamento de scouting. Asimismo, se reducirá el personal.

Respecto al caso Özil, Löw reconoció que la dirección deportiva de la selección "subestimó por completo" la polémica en torno al jugador de origen turco y su fotografía con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.

"Pensamos que el tema desaparecería con el encuentro con el presidente federal de Alemania (Frank-Walter Steinmeier). Mi único pensamiento importante era prepararnos correctamente para el Mundial", declaró el seleccionador.

Özil y su compañero de selección Ilkay Gündogan, también de origen turco, se fotografiaron en mayo, en Londres, con Erdogan en plena campaña electoral del país del Bósforo.

Las imágenes fueron publicadas por el partido de Erdogan, que mantiene unas relaciones diplomáticas con Alemania bastante complicadas, y desataron una enorme polémica. Los jugadores justificaron el encuentro como una cuestión de cortesía y aseguraron que no había tenido ninguna finalidad política.

"Este tema costó energía, era un tema enervante porque siempre estaba ahí", señaló el miércoles Löw. Sin embargo, esta no fue la razón de la prematura eliminación de la selección en el Mundial de Rusia.

Tras semanas de silencio, Özil emitió un comunicado tras el final del Mundial, a finales de julio, en el que anunciaba su salida del equipo en medio de duras críticas de racismo contra la Federación Alemana de Fútbol (DFB).

Para Löw, estas acusaciones son incomprensibles. "Simplemente exageró su acusación de racismo. Nunca ha habido racismo en el equipo, ni comentarios racistas", declaró Löw.