El sueño olímpico de los patinadores norcoreanos en Alemania

Por Britta Körber (dpa)
Oberstdorf (Alemania), 1 oct (dpa) - El público en la localidad alemana de Oberstdorf regaló a Ryom Tae-Ok y Kim Ju-Sik una larga ovación. Todos tenían muy en claro de qué se trataba en la historia de los jóvenes patinadores norcoreanos, los primeros deportistas de su país en lograr el boleto a los Juegos Olímpicos de Pyeongchang 2018.


¿Pero podrán participar en el gran evento del deporte invernal que se disputará en febrero en la vecina Corea del Sur? La escalada bélica en la península tiene al mundo en vilo y nadie sabe lo que puede suceder en los próximos meses. En cualquier caso, el deporte ofreció el viernes una nueva muestra de su potencial integrador.

"Han logrado merecidamente la clasificación a los Juegos Olímpicos. Han dado un gran paso adelante y han estado muy fuertes", los elogió la alemana Aliona Savchenko, quíntuple campeona mundial de patinaje artístico y rival de los asiáticos en el evento.

El dúo mixto norcoreano finalizó en sexto lugar en el certamen clasificatorio Nebelhorn-Trophy, desarrollado en Oberstdorf, al que viajaron incluso periodistas desde Estados Unidos para contar su historia. Ninguno seguramente habrá tenido que viajar tanto como los patinadores, que tardaron cuatro días en llegar a Oberstdorf desde Pyongyang.

Ryom, de 18 años, y Kim, de 25 años, no habían podido entrenar fuera de su país hasta esta temporada. Apenas a mitad de año pudieron viajar por dos meses a la academia de Bruno Marcotte en Montreal. "Tienen un gran espíritu de trabajo y están en camino de convertirse en una pareja de elite", los elogió el entrenador canadiense.

El año pasado no pudieron competir en la Copa Mundial de 2016 en Boston porque Estados Unidos les negó la visa. Este año sí pudieron hacerlo en Helsinki, donde finalizaron decimoquintos.

Tanto el siempre sonriente Kim como Ryom, su compañera de 1,51 metros, comprenden algo de inglés. Sin embargo, todo pasa por su intérprete Ri Chol-Un, que controla estrictamente los temas a conversar y la duración del diálogo con los medios. La instrucción es clara: no van a hablar sobre política, solo deporte.

Sonrientes, ambos aseguran que su deseo es luchar para conseguir medallas. Aunque nadie sabe a ciencia cierta si podrán intentarlo en los Juegos de Corea del Sur.

"Es algo muy difícil de responder ahora", afirma Marcotte, que asegura sentirse muy a gusto trabajando con ellos. "Los amo. No son para nada tímidos".

La entrenadora permanente de ambos es Kim Hyon-son, que tampoco quiere aventurar nada. "Es una decisión del Gobierno, no tenemos nada que comentar".

El hermetismo de Corea del Norte llega a todos los niveles y eso incluye también el deporte. Nadie sabe, por ejemplo, cuántas pistas de patinaje hay en el país. Una vez por año se disputa un gran evento de patinaje en Corea del Norte, aunque muchos países occidentales no envían representantes por motivos políticos.

Ajenos al conflicto, Ryom y Kim eligieron un tema de los Beatles para su presentación en el programa corto, mientras que en el ejercicio libre optaron por la "chanson" francesa. La gran pregunta ahora es si podrán hacerlo dentro de cuatro meses en Pyeongchang, a menos de 100 kilómetros de una de las fronteras más militarizadas del mundo.