Última reunión de líderes alemanes cierra con pequeños acuerdos

Berlín, 30 mar (dpa) - La última reunión de los líderes del Gobierno alemán de coalición, medio año antes de las elecciones generales en el país, concluyó en la madrugada de hoy con una lista de acuerdos en temas menores y dejaron fuera otros como la limitación de los sueldos de los directivos o el matrimonio homosexual.

Tras seis horas y media de reunión, la canciller alemana y líder de la Unión Cristianademócrata (CDU), Angela Merkel; su socio hermanado de la Unión Cristianasocial, Horst Seehofer, y el recién nombrado líder del Partido Socialdemócrata (SPD), Martin Schulz, quisieron lanzar así una señal de que son capaces de lograr acuerdos a pesar de que todos los partidos políticos se encuentran ya en modo electoral.

Los presentes calificaron la primera y última reunión de Merkel con el que será su rival en las elecciones del 24 de septiembre como muy profesional. "No hubo ninguna pelea, ni heridos", declaró un participante sobre el cara a cara con Schulz.

Los tres líderes abandonaron la reunión satisfechos, según fuentes cercanas. Para el jefe de la fracción parlamentaria de la Unión, Volker Kauder, se trata de un "bonito éxito" para los conservadores. "Los temas que acordamos eran naturalmente temas especialmente importantes para la Unión", declaró el jefe del gabinete de Merkel, Peter Altmaier, en la radio alemana Deutschlandfunk.

"Hemos logrado importantes acuerdos", comentó por su parte el presidente del grupo parlamentario del SPD, Thomas Oppermann, a pesar de que su partido no consiguió sacar adelante algunas de sus propuestas.

Seis meses antes de las elecciones generales, justo después del triunfo de la CDU en las regionales de Sarre y poco antes de las votaciones en los estados federados de Schleswig-Holstein (7 de mayo) y en Renania del Norte-Westfalia (14 de mayo), ni la Unión (CDU/CSU), ni el SPD quieren regalar nada que les pueda suponer una pérdida de votos.

Acordaron elevar la pena de cárcel a un año por robos en viviendas -reclamado por los conservadores-, pactaron no reconocer ningún matrimonio en el que uno de los miembros sea menor de 16 años, con independencia de dónde haya tenido lugar el matrimonio, y también decidieron destinar 100 millones de euros para un programa de defensa contra actividades de extremistas.

Asimismo, decidieron apoyar el proyecto de ley del SPD de transparencia salarial en las empresas con más de 200 trabajadores para luchar contra la desigualdad salarial entre hombres y mujeres en un mismo puesto y acordaron las líneas generales para recortar las ayudas a hijos de ciudadanos de la Unión Europea (UE) cuando los niños residan en el país de origen teniendo en cuenta el nivel de ese país.

Sin embargo, el SPD no logró imponer sus propuestas de limitar el salario de los ejecutivos, el matrimonio homosexual, facilitar que los trabajadores que han solicitado jornada reducida puedan volver a tiempo completo cuando lo soliciten o mejorar las jubilaciones de los que durante años tuvieron sueldos bajos. Mientras, los conservadores fracasaron a la hora de sacar adelante una ley que facilite las deportaciones de los que comentan fraude de los servicios sociales.