Tillerson se reúne por primera vez con Lavrov en el marco del G20
Bonn (Alemania), 16 feb (dpa) - El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, se reúne hoy por primera vez con su homólogo ruso, Serguei Lavrov, poco antes de que dé comienzo la primera sesión de trabajo del encuentro de ministros de Exteriores del G20 en Bonn, en el oeste de Alemania.
De acuerdo con la portavoz de Exteriores de Rusia, Maria Sacharova, en el encuentro intentarán sacar las relaciones entre Moscú y Washington del callejón sin salida en el que se encuentran. Es la primera vez que un representante de la administración de Trump se reúne con un miembro del Gobierno ruso.
Las relaciones entre los dos países atraviesan su punto más bajo desde el final de la Guerra Fría. Moscú espera una mejora bajo el liderazgo del nuevo presidente estadounidense, Donald Trump.
Tillerson, antiguo presidente de la junta directiva de la petrolera ExxonMobil, carece de experiencia política pero dispone de contactos internacionales en el mundo de los negocios, especialmente en Rusia, con cuyo presidente, Vladimir Putin, tiene una relación cordial, algo que le ha valido numerosas críticas. Sin embargo, ahora deberán hablar sobre muchos temas difíciles, desde Siria hasta el conflicto en el este de Ucrania.
El secretario de Estado estadounidense, en su primer viaje al extranjero desde que asumiera el cargo y en el que se espera con atención cómo se posicionará en temas como la guerra en Siria o el conflicto en Ucrania, tiene previstos más encuentros bilaterales con motivo del G20, como por ejemplo, con sus homólogos de Brasil y Argentina, José Serra y Susana Malcorra respectivamente.
Tillerson y Lavrov son los dos participantes que más atención suscitan en la reunión de dos días presidida por el ministro de Exteriores alemán, Sigmar Gabriel, en representación de Alemania, que ostenta la presidencia rotativa anual este año.
Entre las 14:00 y las 15:30 (hora local), el jefe de la diplomacia alemana recibirá en la sala plenaria del Parlamento de Bonn, antigua capital del país, a las delegaciones de los miembros del G20: Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea (UE). También acudirá el nuevo secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, y otros países invitados como España.
Solo Australia e India estarán representados en Bonn por sus viceministros. El resto de países acudirán con sus jefes de la cartera ministerial.
Los participantes en la reunión debatirán el primer día sobre la Agenda 2030, es decir, los objetivos de las Naciones Unidas para lograr un desarrollo sostenible.
El viernes, la sesión de trabajo, que terminará hacia el mediodía, se centrará en la prevención de conflictos, el mantenimiento de la paz y la cooperación con África, en la que se quiere lograr una especie de "Plan Marshall" para ese continente.
El G20 es un foro de cooperación de países que juntos representan dos tercios de la población mundial y tres cuartas partes del comercio mundial.
No cuentan con una secretaría, por lo que la coordinación y organización del encuentro recae anualmente en la presidencia rotativa. De esta manera, el país que ostenta la presidencia tiene la posibilidad de marcar la agenda del G20 y organizar, como en este caso, una reunión de Exteriores, algo que es la segunda vez que se hace, siendo la primera en 2012, durante la Presidencia mexicana.
El encuentro en Bonn servirá para preparar la cumbre del 7 y 8 de julio en Hamburgo. Unos 2.000 agentes de policía velarán por su seguridad. Está prevista una manifestación por la tarde a la que se han apuntado de momento 500 personas.
De acuerdo con la portavoz de Exteriores de Rusia, Maria Sacharova, en el encuentro intentarán sacar las relaciones entre Moscú y Washington del callejón sin salida en el que se encuentran. Es la primera vez que un representante de la administración de Trump se reúne con un miembro del Gobierno ruso.
Las relaciones entre los dos países atraviesan su punto más bajo desde el final de la Guerra Fría. Moscú espera una mejora bajo el liderazgo del nuevo presidente estadounidense, Donald Trump.
Tillerson, antiguo presidente de la junta directiva de la petrolera ExxonMobil, carece de experiencia política pero dispone de contactos internacionales en el mundo de los negocios, especialmente en Rusia, con cuyo presidente, Vladimir Putin, tiene una relación cordial, algo que le ha valido numerosas críticas. Sin embargo, ahora deberán hablar sobre muchos temas difíciles, desde Siria hasta el conflicto en el este de Ucrania.
El secretario de Estado estadounidense, en su primer viaje al extranjero desde que asumiera el cargo y en el que se espera con atención cómo se posicionará en temas como la guerra en Siria o el conflicto en Ucrania, tiene previstos más encuentros bilaterales con motivo del G20, como por ejemplo, con sus homólogos de Brasil y Argentina, José Serra y Susana Malcorra respectivamente.
Tillerson y Lavrov son los dos participantes que más atención suscitan en la reunión de dos días presidida por el ministro de Exteriores alemán, Sigmar Gabriel, en representación de Alemania, que ostenta la presidencia rotativa anual este año.
Entre las 14:00 y las 15:30 (hora local), el jefe de la diplomacia alemana recibirá en la sala plenaria del Parlamento de Bonn, antigua capital del país, a las delegaciones de los miembros del G20: Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea (UE). También acudirá el nuevo secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, y otros países invitados como España.
Solo Australia e India estarán representados en Bonn por sus viceministros. El resto de países acudirán con sus jefes de la cartera ministerial.
Los participantes en la reunión debatirán el primer día sobre la Agenda 2030, es decir, los objetivos de las Naciones Unidas para lograr un desarrollo sostenible.
El viernes, la sesión de trabajo, que terminará hacia el mediodía, se centrará en la prevención de conflictos, el mantenimiento de la paz y la cooperación con África, en la que se quiere lograr una especie de "Plan Marshall" para ese continente.
El G20 es un foro de cooperación de países que juntos representan dos tercios de la población mundial y tres cuartas partes del comercio mundial.
No cuentan con una secretaría, por lo que la coordinación y organización del encuentro recae anualmente en la presidencia rotativa. De esta manera, el país que ostenta la presidencia tiene la posibilidad de marcar la agenda del G20 y organizar, como en este caso, una reunión de Exteriores, algo que es la segunda vez que se hace, siendo la primera en 2012, durante la Presidencia mexicana.
El encuentro en Bonn servirá para preparar la cumbre del 7 y 8 de julio en Hamburgo. Unos 2.000 agentes de policía velarán por su seguridad. Está prevista una manifestación por la tarde a la que se han apuntado de momento 500 personas.
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