Merkel, candidata oficial para las elecciones generales de Alemania

Grimmen (Alemania), 28 ene (dpa) - La Unión Cristianodemócrata (CDU) en la región de Pomerania Occidental nombró hoy oficialmente a la canciller alemana, Angela Merkel, como candidata de su circunscripción para las elecciones generales del 24 de septiembre en Alemania.
La líder de la CDU, que participó personalmente en la reunión del partido en Grimmen, en el nordeste de Alemania, se hizo con 165 de los 173 votos, lo que supone un resultado de un 95,9 por ciento.

Para el líder local de la CDU de ese distrito electoral y ministro regional de economía, Harry Glawe, se trata de "un muy buen resultado", a pesar de que en la nominación de hace cuatro años Merkel recibiera el cien por ciento de los votos. "El partido apoya unido a Angela Merkel", indicó.

Desde su primera nominación en 1990 Merkel siempre ha obtenido su escaño en el Parlamento alemán a través del llamado "mandato directo" en la circunscripción en el Mar Báltico, a la que pertenecen la isla de Rügen, Stralsund y desde 2013 también Greifswald.

Este "mandato directo" se obtiene cuando un diputado recibe su escaño por mayoría de votos en su distrito electoral, aunque su partido no haya tenido la mayoría de votos en esta circunscripción.

En las elecciones generales de 2013, Merkel registró un 56,2 por ciento de votos en su distrito electoral. Esta vez el partido populista de derecha Alternativa para Alemania (AfD) quiere quitarle el "mandato directo".

La veterana política confirmó a finales de noviembre su decisión de concurrir por cuarta vez consecutiva como candidata de la formación conservadora a las elecciones generales, en una decisión que reconoció que no fue nada fácil y que tomó tras reflexionar largo y tendido al respecto.

En el tablero político figura ahora un partido populista de derecha y con tintes xenófobos, Alternativa para Alemania (AfD), que según los sondeos se convertiría en tercera fuerza política en el país.

Se trata de una formación que ha sabido capitalizar el descontento del votante conservador alemán al convertir la crítica a la gestión de la crisis migratoria de Merkel en su principal argumento después de que en 2015 el país recibiera casi un millón de refugiados.