Tribunal alemán rechaza nuevo pedido de prisión para Puigdemont

Schleswig (Alemania), 22 may (dpa) - El Tribunal Superior de la región alemana de Schleswig-Holstein denegó hoy la solicitud de la Fiscalía de poner otra vez en prisión preventiva al líder independentista catalán Carles Puigdemont en base a nuevas pruebas presentadas por las autoridades españolas.


La fiscalía de la región del norte alemán había pedido que Puigdemont volviera a prisión al ver riesgo de fuga, pero el tribunal desestimó ese argumento y resolvió hoy mantener el régimen de libertad con medidas cautelares dictado el 5 de abril para el ex presidente del Gobierno catalán mientras se decide su entrega a España.

El alto tribunal dejó abierto cuándo dará a conocer su decisión sobre la solicitud de entrega de España, donde está procesado por rebelión y malversación de fondos en relación con el plan soberanista que abrió una grave crisis institucional en el país.

Se espera que la fiscalía vuelva a pedir hacia fines de esta semana la entrega de Puigdemont a España por ambos delitos. Los jueces del Tribunal, que deberán tomar esa decisión, precisaron hoy que hasta el momento no recibieron esa solicitud.

La resolución del tribunal se refiere al pedido cursado por la Fiscalía el 9 de mayo -y hasta ahora no difundido públicamente- para que se detuviera nuevamente al ex presidente catalán en base al delito de rebelión y por primera vez también en base al cargo de perturbación del orden público especialmente grave.

"El motivo para esto fueron las nuevas informaciones suministradas por los organismos españoles, en especial los videos puestos a disposición donde se muestra la violencia perpetrada contra las fuerzas policiales españolas", señala el escrito de la fiscalía dado a conocer hoy.

"Los desmanes tuvieron una dimensión tal que la Fiscalía General cree justificada la extradición también por el cargo de rebelión. Según el derecho alemán, no sólo se contempla un delito por el cargo de alta traición, sino también por perturbación del orden público especialmente grave. Por ello sigue existiendo riesgo de fuga".

La fiscalía esgrimió estos argumentos ante el Tribunal Superior (OLG) después de mantener a mediados de abril un encuentro en La Haya con fiscales españoles en el que le fue facilitada nueva información que demostraría que el político soberanista incurrió en un delito de rebelión durante la celebración del referéndum independentista ilegal el pasado 1 de octubre.

La portavoz de la fiscalía, Wiebke Hoffelner, dijo a dpa que la solicitud de encarcelamiento no se dio a conocer antes porque hubiera puesto en peligro su ejecución en caso de un fallo positivo del tribunal.

"La solicitud correspondiente se comunica ahora porque de lo contrario hubiera sido totalmente en vano, no hubiera podido ser ejecutada", explicó.

La negativa del tribunal se produce a punto de cumplirse dos meses de la detención de Puigdemont en territorio germano el 25 de marzo cuando intentaba regresar en coche a Bélgica, donde se instaló tras huir de España tras su destitución a fines de octubre.

El 24 de mayo se cumplirá el plazo de 60 días recomendado para responder a una orden europea de detención. El Ministerio Público sopesa presentar una nueva orden de entrega a España en torno a ese plazo, pero evita por el momento confirmar cuándo lo hará.

Una vez que se pronuncie, el caso pasará nuevamente a manos de los jueces máximos de Schleswig-Holstein, que lo analizarán a la luz de las nuevas pruebas.

A principios de abril, la Fiscalía germana presentó una primera solicitud de extradición de rebelión y malversación de fondos en base a la orden de detención europea del Tribunal Supremo de Madrid.

Sin embargo, el Tribunal Regional Superior de Schleswig-Holstein señaló que no veía admisible el delito de rebelión, motivo por el que decidió dejar al líder soberanista en libertad bajo fianza de 75.000 euros después de mantenerlo 12 días en prisión.

El ex jefe del Gobierno de Cataluña, destituido en octubre por Madrid a raíz de la escalada de su proceso independentista, fue detenido el 25 de marzo en un área de servicio del norte de Alemania en virtud de una orden de arresto europea emitida dos días antes por el Tribunal Supremo español.

La justicia del país ibérico lo procesó por rebelión y malversación de fondos públicos debido al plan con el que intentó proclamar una república independiente, causando así una crisis institucional sin precedentes todavía abierta.