Ministro: Audi también empleó software ilegal en Europa y Alemania


Berlín, 2 jun (dpa) - El fabricante de coches Audi, que pertenece al grupo Volkswagen (VW), también empleó un software ilegal para manipular las emisiones en los vehículos diésel en Europa y Alemania, según dijo este jueves el ministro de Transporte alemán, Alexander Dobrindt.


En total están afectados 24.000 vehículos. Hasta ahora, no se había detectado el uso de software ilegal de vehículos de Audi en Alemania. De los coches afectados, la mitad se encuentran en Alemania y la otra en Europa.

El software reconocía cuando el vehículo estaba siendo inspeccionado y activaba el sistema para depurar los gases, señaló Dobrint, quien el jueves se reunió con el director ejecutivo de VW, Matthias Müller.

El miércoles se detectaron estas particularidades en los modelos A8 y A7 con motores diesel V6 y V8. Se trata de vehículos que fueron fabricados entre 2009 y 2013.

VW tendrá hasta el 12 de junio para presentar propuestas para poner a punto las unidades afectadas.

"Está claro que los coches no pueden quedar así. Por eso se tendrán que llamar a talleres", dijo Dobrindt.

Audi y VW ya pagaron en Estados Unidos una indemnización millonaria por haber instalado un software, ilegal en ese país, en unos 83.000 vehículos con motores diésel. Con ese software se conseguían valores más bajos de emisión de gases contaminantes.

El caso costó el año pasado 1.860 millones de euros (2.084 millones de dólares) a la empresa.

En marzo de este año, el CEO de Audi, Rupert Stadler, dijo en la rueda de prensa anual que se estaba revisando todo en la automotriz a raíz de lo sucedido en Volkswagen.

Y mientras se celebraba esa comparecencia ante los medios, más de 100 policías registraron por orden judicial la central del fabricante, así como otras dependencias de la empresa y viviendas de empleados.

La fiscalía abrió una investigación por "sospecha de fraude". Con esta pesquisa se buscaba esclarecer quién estuvo detrás del uso del software ilegal y de los datos falsos.

El escándalo por la manipulación de las emisiones afecta mundialmente a 11 millones de vehículos del grupo Volkswagen, entre ellos autos de Audi, Skoda y Seat. En Alemania hay actualmente 2,6 millones de coches diésel manipulados; de los cuales 1,75 millones ya fueron acondicionados.