CIDH expresa preocupación por el uso de la fuerza en protestas en Colombia


13 de junio de 2017
Washington, D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresa su preocupación por la represión de protestas y manifestaciones en Buenaventura, Colombia, por parte del Escuadrón Móvil Anti-Disturbios (ESMAD).
La CIDH urge al Estado colombiano a investigar si hubo un uso excesivo de la fuerza y a adoptar medidas urgentes y razonables para garantizar plenamente los derechos de reunión pacífica y de libertad de expresión.

De acuerdo a información de público conocimiento, el 16 de mayo se inició una huelga general en Buenaventura que se extendió por 22 días y durante la cual se realizaron marchas y protestas. Las movilizaciones fueron en reclamo de acceso a fuentes laborales, vivienda, agua potable, educación y salud, entre otros derechos económicos, sociales y culturales. El 2 de junio de 2017, organizaciones de la sociedad civil y comunidades denunciaron que personal fuertemente armado del ESMAD realizó un operativo represivo en Buenaventura, incluyendo el uso de tanques entre civiles. La información recibida por la CIDH también indica que se utilizaron gases lacrimógenos contra manifestantes pacíficos, incluidos niños, personas mayores y personas con discapacidad.

La Comisión Interamericana expresa su profunda preocupación por la información recibida en cuanto a que podría haber habido un uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades de seguridad. Los Estados deben adoptar medidas a fin de garantizar que todos los sectores de la sociedad puedan ejercer su derecho a participar pacíficamente en protestas, sin temor a sufrir actos de violencia. La conducta de las fuerzas de seguridad debe respetar en todo momento las normas internacionales de derechos humanos y cumplir con los principios de legalidad, necesidad y proporcionalidad.

Adicionalmente, la CIDH llama a los Estados a implementar medidas que impidan el uso excesivo de la violencia, especialmente contra las personas afrodescendientes en América. La Comisión Interamericana ha estado monitoreando, a través de audiencias temáticas regionales y otros instrumentos, casos que habrían involucrado el uso excesivo de la fuerza por agentes de policía contra personas afrodescendientes. A este respecto, la CIDH insta al Estado a que adopte medidas legislativas, políticas públicas y medidas institucionales coordinadas para eliminar la discriminación racial, incluyendo medidas para proteger y garantizar el derecho a la no discriminación en el contexto de las manifestaciones.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos destaca asimismo el deber de los Estados de adoptar todas las medidas a su alcance para promover el respeto y la garantía de todos los derechos económicos, sociales y culturales, teniendo en cuenta la situación de exclusión sistemática de los afrodescendientes y sus comunidades. Los Estados deben dedicar recursos humanos y fondos para ayudar a neutralizar los prejuicios y los estereotipos raciales y, al mismo tiempo, mejorar las condiciones de vida de las personas de ascendencia africana con respecto a la atención médica, la vivienda, la educación y el trabajo.

En este sentido, la CIDH saluda la realización de un diálogo constructivo entre representantes de los grupos de manifestantes y el Gobierno, que culminó en un acuerdo alcanzado el 6 de junio, tras el cual se levantó la huelga. La Comisión espera que este acuerdo permita al Estado de Colombia a avanzar en garantizar derechos económicos, sociales y culturales básicos, como el acceso al agua potable, salud, vivienda, educación y derechos laborales. Existe un estrecho vínculo entre los derechos económicos, sociales y culturales y los derechos civiles y políticos. Las diferentes categorías de derechos constituyen un todo indivisible basado en el reconocimiento de la dignidad de la persona humana, razón por la cual ambos requieren protección y promoción permanentes para su plena realización.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.