Prensa: Soldado ultra alemán detenido tenía guía para fabricar bombas

Berlín, 13 may (dpa) - El teniente del ejército alemán Franco A., detenido por sospecha de planear un atentado terrorista bajo la identidad falsa de refugiado sirio, disponía de un manual de fabricación de bombas, informó ayer el semanario germano "Der Spiegel".


Según la publicación, los investigadores responsables del caso que ha devenido en escándalo hallaron en un disco duro el llamado "Manual de explosivos de los muyahidines", ampliamente difundido en los años noventa en círculos terroristas islamistas.

Asimismo, "Der Spiegel" indicó que en posesión del militar se encontró la obra "Der totale Widerstand" (La resistencia total), un libro adquirido en Suiza y prohibido en Alemania que circula habitualmente entre miembros de la extrema derecha y que describe métodos de resistencia contra una ocupación armada.

Durante las investigaciones las autoridades también accedieron a información que permitiría hacerse una imagen detallada de las convicciones personales del militar.

De esta documentación se desprende, por ejemplo, que para Franco A. -cuyo apellido no se menciona en Alemania por motivos legales de protección de la privacidad- la violencia no es una "última opción" sino un "medio útil".

El caso del teniente ultraderechista ha hecho saltar las alarmas en el país por la sospecha de que exista toda una red ultraderechista en las Fuerzas Armadas y ha puesto entre las cuerdas a la ministra de Defensa del país, Ursula von der Leyen, que prometió reformar las estructuras de mando del Ejército así como adoptar medidas disciplinarias y fomentar la educación cívica de los soldados.

En el marco de las pesquisas, además de Franco A., ha sido detenido un estudiante y el teniente Maximilian T., acusado de colaborar con el primero para cometer un atentado de inspiración ultraderechista y de realizar conjuntamente una lista de posibles objetivos ordenados bajo diversas categorías, entre los que se encontraba el nombre del ex presidente de Alemania Joachim Gauck o el ministro de Justicia, Heiko Maas.