Jefe de la ONU quiere nuevas conversaciones en 40 años de Sahara Occidental Impasse

VOA

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo que quiere renovar las negociaciones para resolver el conflicto del Sáhara Occidental, que ha enfrentado a Marruecos contra el movimiento de independencia del Frente Polisario durante 40 años.


En un informe al Consejo de Seguridad de la ONU esta semana, Guterres propuso relanzar las negociaciones "con una nueva dinámica y un nuevo espíritu".

El objetivo, dijo, debería estar alcanzando "una solución política mutuamente aceptable" que incluya "un acuerdo sobre la naturaleza y la forma que el ejercicio de la autodeterminación" tomaría para el disputado y rico en minerales del Sahara Occidental.

Marruecos anexó el Sáhara Occidental, una antigua colonia española, en 1975 y luchó contra el Frente Polisario. La ONU organizó un alto el fuego en 1991 y estableció una misión de mantenimiento de la paz para supervisarla y ayudar a preparar un referéndum sobre el futuro del territorio que nunca ha tenido lugar.

Marruecos considera al Sáhara Occidental sus "provincias del sur" y ha propuesto dar al territorio una amplia autonomía. El Frente Polisario insiste en la autodeterminación a través de un referéndum para la población local, que estima entre 350.000 y 500.000.

Guterres dijo en el informe que espera iniciar nuevas negociaciones "sobre la base de consultas con los partidos y los estados vecinos, los miembros del Grupo de Amigos del Sáhara Occidental y el Consejo de Seguridad, así como con otros partidos importantes".

El gobierno de Marruecos quiere que Argelia participe en futuras conversaciones y considera al país vecino del norte de África como una parte en el conflicto. Argelia dice que no está directamente involucrado en el conflicto y apoya el proceso de las Naciones Unidas.

El jefe de la ONU expresó su preocupación por la situación tensa en Guerguerat, una ciudad situada en la zona de amortiguamiento de la frontera entre Marruecos y Mauritania, y pidió al Polisario que "se retire total e incondicionalmente" del sitio.

La crisis de Guerguerat comenzó en agosto, cuando Marruecos comenzó a trabajar en un camino en la zona. Ragat dijo que el trabajo era necesario para combatir el contrabando. El Frente Polisario protestó y desplegó las fuerzas armadas, diciendo que el trabajo vial violó el acuerdo de alto el fuego. Marruecos negó haber violado el acuerdo.

A petición de los Estados Unidos, Marruecos se retiró de Guerguerat en febrero. Las fuerzas del Frente Polisario permanecen en su lugar.

Se espera que Guterres nombre a un nuevo enviado para el Sáhara Occidental. Marruecos acusó al anterior enviado especial, Christopher Ross, de tener un "sesgo a favor del Polisario". Ross renunció en enero.

El nombre más a menudo flotó para suceder a Ross es el ex presidente alemán Horst Kohler.