Ex ministro RREE Steinmeier asume la jefatura de Estado de Alemania

Por María Laura Aráoz (dpa)

Berlín, 17 mar (dpa) - Alemania tendrá a partir del domingo un nuevo jefe de Estado, el ex ministro de Exteriores y uno de los políticos más populares del país, Frank-Walter Steinmeier.

El dirigente del Partido Socialdemócrata asumirá el cargo que deja tras un periodo de cinco años el antiguo pastor protestante y luchador de los derechos civiles Joachim Gauck.

Steinmeier, de 61 años, será el duodécimo presidente de la República Federal de Alemania, fundada tras la Segunda Guerra Mundial en 1949.

Gauck, de 77 años, será despedido hoy oficialmente con honores militares y el domingo recibirá junto con su compañera Daniela Schadt en el Palacio Bellevue a Steinmeier y la esposa de éste, la jueza Elke Büdenbender.

Steinmeier, quien dirigió en dos ocasiones la diplomacia alemana, fue elegido presidente el 12 de febrero por una amplia mayoría en la votación en la Asamblea Federal en Berlín.

El socialdemócrata era el candidato de consenso de los partidos que integran la actual gran coalición que gobierna Alemania: la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Angela Merkel y su partido hermano la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU), así como de su Partido Socialdemócrata (SPD).

La mayor potencia europea se encomendará a un político experimentado en la gestión de crisis internacionales. Steinmeier se implicó intensamente en busca de la paz en el conflicto entre Ucrania y los separatistas prorrusos y también respaldó el proceso de paz en Colombia.

En tiempos de gran polarización social, Steinmeier llamó en su discurso de agradecimiento a sus compatriotas a tener valor y no temer al futuro.

Steinmeier jurará el cargo el miércoles próximo ante las dos cámaras del Parlamento en el Reichstag, donde expondrá las directrices de su futura gestión.

El presidente federal, cuyo mandato tiene una duración de cinco años, ejerce una función más bien protocolaria y de carácter representativo.

La Constitución alemana otorga escaso poder político a la figura del jefe del Estado, aunque se entiende que con sus discursos puede orientar y convertirse en un elemento integrador y en una instancia moral.

El presidente no interfiere en la labor del Gobierno, que compete al canciller (equivalente a primer ministro), pero cobra importancia en caso de que el Parlamento sea disuelto o de que un Gobierno se quede en minoría.